lunes, 30 de julio de 2012

El Corsé de la Institucionalidad.

LA RESTAURACION DEL FRENTE CONSERVADOR (3)
El jueves 24 de julio el Senado Uruguayo dio una discusión conceptualmente de fondo sobre el significado de la Democracia Representativa. Interpelando al ministro de relaciones exteriores uruguayo, Luis Almagro, los representantes de la Derecha Criolla expusieron con nítida claridad, su concepción de la Democracia Representativa y la Institucionalidad que la contiene. Los acontecimientos acaecidos en Paraguay , con el derrocamiento del Presidente Constitucional Fernando Lugo, corolario de una política de desestabilización denunciada hace más de dos años por los cables interceptados a los Estados Unidos por Wikileaks ,la reacción de la comunidad internacional y el ingreso de Venezuela al Mercosur, fueron los elementos superficiales de la discusión. Fundamentan la decisión del senado paraguayo en que representa a la mayoría política del país, y manifestaron claramente que ellos como oposición, juntos, pasan a ser la mayoría política del Uruguay, dejando entrever que una decisión de igual característica no seria tan descabellada por estos lares. Es que la Derecha en su proceso de acumulación de fuerzas, ha ido ensayando las respuestas que le permitan retomar el control político de la sociedad, justificando jurídicamente y desde lo Institucional para no resquebrajar la legalidad, que la comunidad internacional reclama como garantía del Estado de Derecho. La Suprema Corte de Justicia en Honduras, el Parlamento Paraguayo, la acumulación consolidada en los cuadros policiales en Ecuador, Bolivia y algunos estados de Brasil, las diversas vías en Venezuela, la acumulación electoral alcanzada en Chile, son las expresiones más claras de ascenso de la Derecha Política en el continente. Son una vuelta de tuerca en la Estrategia de los Conflictos de Baja Intensidad, dados con un elegante golpe institucional, netamente civil. Este escenario internacional ameritaría una reflexión de la izquierda de hasta donde su participación en el respecto del marco Institucional le permite defender las administraciones populares conquistadas. No había dudas en el marco de los gobiernos desplazados por la fuerza de la incapacidad de respuesta de la izquierda y de las fuerzas democráticas en un proceso de acumulación que no logro alcanzar una respuesta contundente al avance fascista. Pero eso será motivo de un análisis más específico que supera los límites de estos artículos. En el caso concreto de Uruguay, todo parecería indicar que lejos de propiciar una desestabilización institucional la formula vendrá por el lado de lograr una derrota electoral. El último ballotage en las elecciones nacionales parece confirmar esta teoría, a la que se suma los ensayos de acumulación electoral que permitieron el triunfo en las Intendencias de Salto y San José. La declaración del Congreso de la UNA, sector reaccionario del Partido Nacional, es una señal de que se acabó la época de Dialogo Nacional que la administración de Mujica impulso como característica de su gobierno. Abriendo las puertas a la participación a la oposición como uno de los signos característicos con respecto al gobierno de Tabaré Vázquez, la Derecha no demoro en comprender el escaso margen que sumarse a esa política le dejaba para su propio crecimiento. Por otro lado, la histórica práctica de Institucionalidad en el Uruguay es incomparable con la Paraguaya y con la mayoría de las de América Latina para pensar en una aventura parecida, pero tampoco es descartable el perfeccionamiento de los mecanismos jurídicos que puedan obrar en el sentido de poner las contradicciones entre una norma legal y la sustentabilidad política. Desde la prensa, que es por donde se construye la Agenda Política, la Derecha ha logrado instalar el tema de la Inseguridad, la Educación, logro imbuirse en las manifestaciones en contra de Aratiri y profundizar el desencanto con la administración de la Intendencia capitalina en el servicio de recolección de basura. Evitando la tentación de afirmar que a veces desde la izquierda le levantamos “centros” en términos deportivos a la Derecha, hay que reconocer sus propios méritos. Haber logrado las firmas para plebiscitar la Baja de la Edad, no fue solo la falta de criterio de la izquierda para confrontar sino que fue un proceso de acumulación, porque fue el espectro político más reaccionario el que se puso la campaña al hombro. La izquierda subestimo la capacidad de estos sectores y aposto a que lo repulsivo de su imagen no le permitirá alcanzar el objetivo. A esos ajustes de la Derecha Política hay que sumar un fenómeno político de los últimos tiempos y es la perdida de la estigmatización del concepto Derecha que hoy ya no tiene un significado peyorativo. Una última encuesta realizada en Uruguay devela que en la franja de población más joven y con una visión pragmática de los resultados de una gestión política, el ser de Derecha no tiene la carga negativa de antaño. Lo que a la Derecha le sigue sin surgir es el candidato que pueda enfrentar las alternativas electorales para lo cual la izquierda aún tiene unos cartuchos. La izquierda no debería confiar sus cartas a esa debilidad electoral del enemigo, porque esa debilidad es la que la hace repensar caminos que le “aflojen el corsé institucional”. Y aún no está demostrado que la izquierda logre otra forma de defensa de sus conquistas que la movilización popular. La izquierda no está movilizada en la calle ni tampoco se expresa en las barras del parlamento nacional o departamental. Y para un “ejercito de leguleyos reaccionarios” lanzados a reconquistar todo el poder, no hay nada mejor que agitar las togas de juristas en el “desierto popular”.

viernes, 20 de julio de 2012

El Reblandecido Callo de la Derecha (Parte 1)

“ Haciendo una rápida y superficial descripción de los últimos movimientos políticos de la derecha en Uruguay, a modo de análisis ponemos énfasis en general en los posibles acuerdos electorales envalentonados por haber obligado al ballotage, haber alcanzado las firmas por la minoridad, y la movilización en torno a la inseguridad que ahora también cruzan el río Uruguay”.
Favorece este clima el triunfo de la derecha en España, en Chile, y la movilización creciente con signos de desestabilización en Ecuador, Venezuela, Bolivia y jurídicamente contenido en Paraguay. Pero en la lucha política esto no tiene grandes novedades. ¿Cuáles son las novedades que nos permiten visualizar una recomposición del frente conservador y que debería tenernos más atentos? Derecha económica, social y política Es hegemónica la presencia de los integrantes de la derecha al frente de las empresas, negocios e inversiones. Que muchos de ellos no tengan el rostro reaccionario de los 60, e incluso que financien a todo el espectro político y realicen acuerdos con administraciones progresistas o el movimiento sindical, no los hace dudar de las bondades de mantener una correcta gestión del sistema capitalista, pero éstos tendrían mayor sensación de seguridad y comodidad si sus personeros volvieran al gobierno. Un estudio realizado por determinadas consultoras, indica que en los últimos tiempos, ser denominado “de derecha” ha dejado de ser peyorativo. Creemos por un lado, que muy buenas gestiones de izquierda y sus logros no han alcanzado a “enamorar” socialmente lo necesario, y por otro, que subsisten concepciones de la administración que durante más de un siglo predominaron el manejo del Estado y que son muy difíciles de modificar. Hay que mencionar también el fenómeno montevideano de las generaciones nacidas a partir de 1989, que no han tenido otro modelo para comparar la gestión municipal capitalina, que el del Frente Amplio. En términos políticos, el electorado cada vez es menos cautivo y los sectores más leales cada vez se reducen más, incluso en la izquierda. Pero mientras la derecha, fortalece la idea de familia ideológica que le permita generar un espacio común en la suma de las tradicionales divisas, se están dando actualizaciones Ideológicas dentro de los partidos tradicionales. En ese sentido el reciente Congreso Ideológico del Partido Colorado, es a nuestros ojos el intento más profundo de restauración de esa derecha, porque la lógica electoral está sujeta a las leyes electorales y las coyunturas políticas, pero las definiciones ideológicas construyen las bases de una proyectada hegemonía. Divido en talleres temáticos el Congreso Colorado, pero a modo de las Unidades Temáticas del FA, abordó distintos aspectos que finalizaron con una propuesta o definición. En el aspecto ideológico hay elementos dignos de ser tomados en cuenta. Dice una parte de la resolución: “El orden social vigente conlleva injusticias y debe ser profundamente transformado. La dignidad inherente a cada ser humano, impide que se le considere como a una mercancía más, a la que el funcionamiento del mercado puede depreciar o marginar. La sociedad solidaria que queremos construir, debe garantizar a cada persona los bienes y servicios indispensables para vivir con decoro. Y debe asegurar también una efectiva igualdad de oportunidades en el punto de partida, para que cada uno desarrolle libremente sus capacidades, sin privilegios ni desventajas heredados”. Partido Colorado, junio 2012. Algunas apreciaciones: quien presidió dicho taller fue el ex tupamaro Kimal Amir. Tengo el convencimiento que en parte de esa cita está su pluma, perteneciente a una pléyade de intelectuales que vinieron por izquierda convencida de que podían filtrar ideas de izquierda en los partidos tradicionales, a quienes consideran la herramienta política adecuada para las transformaciones en el Uruguay. En realidad vendieron su alma al diablo, pero aquí hay una muestra de hasta dónde pudieron avanzar. En el fondo, conservo la esperanza de que Amir opere como un “hombre de Maisinicu” entre los colorados, como el “negro Cecilio” entre los blancos. (Y esto está escrito con toda malicia, claro). Hay un rescate de la concepción social de José Batlle y Ordóñez y de su obra de principio de siglo. Les sobran motivos para rescatar la simbología de la “política de Sobretodos” que hizo avanzar al país en el desarrollo capitalista, instaló de una vez y para siempre los “amortiguadores” en la resolución de conflictos y consolidó una clase media instalada en la función pública como hegemonía económica social y cultural. Con respecto a la cita, encontraremos en el resto de los documentos pero también en el actuar de dirigentes connotados, importantes contradicciones con lo allí planteado; no obstante esas y otras definiciones están pensadas como sostén del trabajo de nuevos actores del partido necesitados, como todo militante político, de sentirse abanderados de una causa de justicia social. Son organizadores y agitadores en los barrios humildes, en los centros de estudios, entre los trabajadores y funcionarios del Estado, en las cámaras empresariales. Pensar solo en la expresión electoral es una superficialidad. Y tenemos lecciones históricas. Ningún otro sector, en la historia del movimiento progresista uruguayo, tuvo una actitud más consecuente de transformación social que el anarcosindicalismo de principios de siglo pasado, con un rol casi protagónico en la construcción del movimiento sindical. Sus Ateneos fueron verdaderos centros de difusión de las ideas socialistas y de la cultura. Sin embargo, la política del batllismo los fue absorbiendo, al punto de que importantes dirigentes terminaron siendo constructores del Uruguay Batllista, y por ahí andan las anécdotas del colorado Brum dando cobijo a los anarquistas acusados de pertenecer a la rama expropiatoria. Jorge Batlle supo decir en voz alta que al igual que su pariente, él tenía un lugar en el sistema para los Tupamaros. Pero más allá de la suerte de los distintos grupos, la reelaboración de la hegemonía política y cultural es constante sobre el resto de la sociedad.􀂄 􀂄Ricardo Pose

La perpetuidad de la Pantera Rosa

Astuto, inteligente, calculador, con la elegancia de un gentleman inglés, el ex Teniente General Jorge Rafael Videla fue apodado entre sus pares militares como la Pantera Rosa por las cualidades antes descriptas. Presidente de la Primera Junta Militar del Golpe de Estado 1976, introdujo a la República Argentina en uno de sus más infames periodos históricos; a la sentencia de cadena perpetua dictada en diciembre de 2010 se le suma la condena de 50 años como autor responsable de la desaparición y secuestro de menores. Militar de vasta trayectoria en el Ejército argentino, este Teniente General nacido en 1925 llegó el 24 de marzo de 1976 con agenda propia. Debe recordarse que en la vecina orilla, la presencia de militares en la política argentina en base a cuartelazos, incluido Perón, sembró una generación de uniformados no asépticos políticamente. Cuando Videla asume como Presidente de facto del Proceso de Reorganización Nacional, ya se habían dado los golpes en Uruguay y Chile. Videla toma distancia de la figura emergente del dictador chileno Augusto Pinochet, al punto que el Partido Comunista Argentino, confiado en distanciarlo más de aquel, apoya el golpe de Estado y se convierte en sostenedor de las relaciones comerciales con la Unión Soviética. Los Montoneros y el esmirriado PRT-ERP verán en el golpe la justificación de su existencia como alternativa popular y la lucha armada. Bajo el lema de Dios, Patria y Hogar, Videla llega con un planteo de nacionalismo al estilo del Eje nazifascista que incluso lo llevará a reeditar el conflicto por el canal de Beagle cuando las dictaduras militares de Chile y Argentina estuvieron a punto de entrar en guerra. La dictadura contó con el apoyo inmediato de la Iglesia Católica y los empresarios. Destituida Isabel Martínez de Perón, a quien esta rama del Ejército acusaba de no poder combatir eficazmente a la guerrilla, el despliegue de la guerra contra la subversión o todo lo que amenazara de tal, fue completo y letal. Impuso el criterio de Disposición Final para los detenidos políticos, categoría por la cual ese ser humano pasaba a ser un objeto inservible, en un código bastante parecido al usado por el nazismo que hablaba de Solución Final. En Tucumán en una lista de 293 detenidos las iniciales D.F. al lado del 193, nos cuenta de su posible final. No en vano Argentina cuenta con la escalofriante cifra de 30 mil Detenidos Desaparecidos. Aplicando el decreto de octubre de 1975, todavía gobierno “democrático” de Isabelita, el aniquilamiento de los brotes subversivos no se detuvo siquiera en los vientres grávidos. Con una suerte de orden no escrita pero verbalmente oficializada para aniquilar, los horrores cometidos no tardaron en dañar su imagen internacional, incluido el apoyo de los Estados Unidos; por un lado se estaba acercando la era Carter, demócrata que como Presidente apoyaba las gestiones de la Comisión Internacional de Derechos Humanos y por otro lado, el asesinato de sacerdotes que no podían ser acusados de marxistas, generó rechazo en la opinión pública estadounidense. Pero el Teniente General estaba convencido de su poder y de estar ganando con su sacrificio el camino de la salvación. La interna militar y el conflicto de poder entre las tres ramas militares aun lo mantenía equilibrado con el apoyo de Massera y Arestín, lo que le permitiría gobernar hasta 1981. En ese lapso debió sin embargo apuntar sus baterías para modificar su imagen internacional en un contexto que cada vez aislaba más a la dictadura. En ese sentido hubo algunos hechos bastante significativos. A pesar de la barbarie de la quema de libros masivas más grandes que conozca la historia realizada en una plaza pública, la dictadura, ya consiente del poder de los medios de comunicación, organizó una mediática reunión de intelectuales, donde tuvo el respaldo tácito de Jorge Luis Borges y Ernesto Sábato quienes vendieron su alma al diablo y aseguraron su lucro editorial. Se organiza el mundial de Futbol “Argentina 1978” con las figuras emergentes de Menotti y Maradona quienes consagrarán a Argentina campeona del mundo. Con una opinión publica consumidora de “carne humana” y del chismerío del mercado de la TV, el apoyo de Mirta Legrand y Susana Giménez y los servicios incluso cárnicos de vedettes en pleno proceso de consagración como Moría Casan, Noemí Alan, Graciela Alfano daban la idea de un país que finalmente había alcanzado la “paz interna”. Sin embargo las denuncias internacional
es y algunas torpezas de los propios militares, como aquella montada conferencia en México, de una supuesta Dirección de Montoneros que convocaba a la “subversión” a su rendición, seguían aislando a la dictadura en la comunidad Internacional. Las políticas económicas de Martínez de Hoz primero y Felipe Cavallo después llevaron al descalabro económico a lo que se sumó la derrota en la guerra de Malvinas. Este Teniente General junto con los integrantes de la Junta de Comandantes que aplicaron el método de desaparición forzada utilizado por Francia en la guerra de Argelia, que integraron el Plan Cóndor con las dictaduras del Cono Sur, empezaron a ser enjuiciados en diciembre de 1985. Juicio público que inspiro la famosa frase de Julio María Sanguinetti de que no se podía comparar el juicio Argentino contra 30 mil detenidos desaparecidos por el de unas decenas en Uruguay. Condenado a cadena perpetua en aquel momento y degradado de su condición de militar, fue indultado por el gobierno de Menen. En 1998, y derogado el Punto Final de Menen, es nuevamente enjuiciado por el robo de bebés, sufriendo por razones de edad arresto domiciliario y luego encarcelado en la Base Militar de Campo de Mayo. En Junio de 2012 “la Pantera Rosa” recibe 50 años más de condena; convencido de su rol ante Dios, confesó la desaparición forzada como método para que la sociedad no tuviera que asumir los 8 mil asesinatos cometidos contra presos políticos. También está convencido que muchas las detenidas embarazadas, utilizaron su gravidez como escudos humanos en el enfrentamiento.􀂄 􀂄Ricardo Pose

Las movilizaciones chavistas no serán transmitidas

  El rol de los grandes medios de comunicación y ahora de las redes sigue siendo el mismo que cuando la derecha dio el golpe de estado contr...