domingo, 9 de marzo de 2025

¿Y que si a los excluidos se les diera por tomar físicamente los Data Center?

 




“El futuro posible en un mundo interconectado”

(Ponencia a ser presentada en el Coloquio Patria)

La Habana Cuba marzo 2025.

 ¿Cuándo empezó el futuro interconectado, fue en el ardiente romance del caballero de la Patagonia Argentina con la chica japonesa de un suburbio de Tokio, en los giros bancarios de una financiera chilena a una cuenta de un banco en Ámsterdam, en los planos enviados desde la casa matriz de una automotora en Alemania a un taller en Colombia, en un ataque dirigido desde el cuartel de la CIA en Estados Unidos a un comando en Afganistán, o en todo eso casi al mismo tiempo?

El mundo interconectado acompañó el proceso de globalización, y la globalización le dio un aparente estado universal a la interconexión; sin embargo para una buena parte de la humanidad hay un apartheid tecnológico, una no capacidad de utilizar la tecnología y adaptarla para generar y acceder a la riqueza en todo el continente africano, salvo en Sudáfrica[i].

Pero hay una inmensa masa de excluidos, de no acceso a los más elementales bienes y servicios de una sociedad, del mercado laboral, que tampoco forman parte del universo digital.

Si la Industrial modificó de una vez y para siempre la sociedad feudal, la tecnológica viene modificando a la sociedad tal cual la conocíamos, pero paradojalmente, su impacto es más perceptible en los aspectos culturales (culturales desde una concepción antropológica) que en la materialidad, aunque la base material que permite la tecnología digital no se diferencia demasiado de la necesidad de una industria clásica detrás.

La tecnología digital vino a establecer además nuevos paradigmas en las luchas geopolíticas, en la noción de naciones, de universalidad, en la noción de Libertad y en la del Individuo, con el signo nada menor que la alta movilidad en el flujo de capitales supedita el mercado productivo al financiero.

La posibilidad de una gobernanza en manos de la Inteligencia Artificial pone en cuestión la frontera de la superioridad de la especie humana con respecto a si misma, aunque siga predominando al resto de los seres vivos,  convirtiendo a la odisea del espacio y al caos de sociedades de individuos regidos por algoritmos, en una realidad que cada vez tiene menos de ciencia ficción[ii].

Un dedo índice parece ser más que suficiente para oprimir una tecla y pasar a ejecutar una orden de bloqueo o embargo que oprima a una sociedad.

Quizás lograr que el flujo de una serie de simbolismos de valores de cambio económico modifique su rumbo sea más complejo que apretar un botón, pero el ejemplo es gráfico y la era digital lo hace posible.

Hoy lograr arruinar el flujo de capitales es bastante más complejo que lo que lograron hacer los revolucionarios de las colonias americanas cuando tiraron al mar toneladas de té de los ingleses.

Por el ojo de la cerradura

La sensación de llevar el “mundo” en el bolsillo mediante un celular no parece descabellada; se pueden ver guerras casi en vivo y en directo, obtener información, consultar diccionarios y distraerse con mucho, mucho entretenimiento y realizar vínculos con otras personas, convencidos de formar parte de la realidad, mirándola por el “ojo” de la cerradura.

Como se dijo más arriba, individualmente estos aparatos permiten el “libre albedrío”, esto es que uno puede decidir que contenidos consumir o no, y se termina naturalizando de tal manera que hasta los caprichosos algoritmos parecen macanudos.

No solo la gente consume información, también la produce, algunos honestamente y desde su subjetivismo, sus sensibilidades y sin mayores requerimientos que verse obligado a tener que dar y menos explicar el contexto general.

Lo hace la gente común a instinto pero también es lo que abonan los grandes medios de comunicación de la hegemonía en el poder.

Emotiva, sencilla (por momento casi infantilizada) y de tono sensato son algunas de las características de la información recibida y producida.

La realidad es percibida entonces a través de miles de ojos de cerraduras, que permite ver muchas cosas pero nunca el cuadro completo; sin embargo la humanidad se está adaptando rápidamente a ésta visión fragmentada de la realidad donde el límite de lo real y lo virtual cada vez es más difuso, sin dejar de mencionar que lo virtual opera casi como el refugio a modo de las religiones o el pensamiento idealista, para abstraerse de los problemas reales[iii].

El retorno al mundo de las cavernas de Platón.

No hay un solo campo de la actividad humana que escape al filtro del ojo de la cerradura; arte, cultura, trabajo, relaciones humanas, economía y la política están presentes allí para oficiar como atajo del encuentro personal con el otro, sin llegar (por el momento) a convertir a los individuos en monjes de clausura.

Estas afirmaciones muy generales por supuesto no son indiferentes a la realidad de que aún en el mundo caótico y ordenado de lo digital, el acceso al mismo  también reconoce de la existencia de usuarios y excluidos, de grados de acceso y manejo de mejor y más información, de meros y pocos emisores que definen los contenidos, y una muchedumbre de receptores en pasiva actitud de consumidores.

El otro gran desafío es analizar que sucede con los procesos de Conocimiento[iv].

Psiquis

Además de los cambios en el lenguaje escrito y en el desplazamiento de la lectura impresa en papel, la psicología está advirtiendo de algunos efectos que está produciendo el uso de los dispositivos.

Estos efectos se advierten en un comportamiento más confrontativo de los vínculos e incluso con altos niveles de intolerancia que pueden tomar la forma de una agresión o de la cancelación (una brutal forma de agresión pero por eliminación digital de la presencia del otro).

En los jóvenes la presencia de cuadros de depresión por los niveles de aceptación social (o no) viene haciendo estragos, y según estudios la preferencia de vínculos a distancia está ganando terreno sobre las relaciones afectivas e incluso íntimas presenciales.

Las campañas de “enchastres” o bulling también están presentes y lo que se inició como un simple sitio de entretenimiento y de realización de nuevas amistades, está dejando de ser un lugar amable.

Estos cambios del comportamiento sobre todo en el terreno de las emociones por supuesto que no podía dejar de ser oportuno, un terreno fértil,  para sembrar lo ideológico.

La imposición de un modelo y una estética, un patriarcado desde lo digital naturalizado,  el estímulo a figuras en un terreno donde ha ganado la frivolidad y la banalidad, encuentra campo fértil para inducir a buena parte del electorado de una nación a elegir a determinados candidato/as sobre otros, o incidir sobre el humor político de una parte de la sociedad. (Guerra cognitiva)[v]

Lo que se hace difícil de  comprender, aceptar y en todo caso como digerir tachuelas con un buche de agua, es que las disputas políticas e ideológicas, informativas, religiosas, económicas forman parte de un teatro de títeres,  donde los titiriteros manejan los hilos a su antojo, a buen resguardo de las consecuencias, siendo además un rentable negocio económico.

Los hilos del titiritero

El ejemplo más contundente es el de Elon Musk que,  apóstol evidente del neofascismo que  consagró su carrera como uno de los asesores de Donald Trump.

Sin embargo, antes de que se hiciera dueño de Twitter y luego lo patentara como X, e incluso después,  ningún dirigente político, del mundo de los negocios o dirigentes sociales de la orbe iba a renunciar ni renunciaron al uso de dicha herramienta de comunicación.

Observatorios de la gestión democrática del sitio florecieron en todo el mundo para medir y denunciar situaciones de censura o digitación de las opiniones, y las pocas herramientas alternativas a Whatsapp (telegram, signal, etc) no logran más que cumplir con el papel de la competencia capitalista en el mercado internacional de las comunicaciones.

Los titiriteros dejan fluir por sus redes a tirios y troyanos; figura el amplio espectro político en un mundo diverso aún de contrincantes en plena confrontación, los que votan bloqueos económicos y los que lo resisten, los que venden armas y los que exigen paz, porque después de todo, aún en el clímax de una disputa en el campo de la información, las enormes mayorías de la población mundial, no deja de ser una masiva tribuna espectadora[vi].

El 1% más rico de la población del planeta ni siquiera se tiene que preocupar en el movimiento de tensión o distención de los hilos de las marionetas.

¿Hay contradicción en la inversión de la extracción del litio y la matanza de las poblaciones (Congo) que habitan encima de él?

Motores y caminos

La revolución tecnológica no solo ha transformado el mundo de las comunicaciones digitales; ha mejorado sustancialmente los medios de transporte y buena parte de las rutas terrestres, aéreas y marítimas generando una importante interconectividad.

Salvo el dominio de las lógicas capitalistas del negocio, no parecen haber limitantes en la capacidad de trasladarse y la producción de diversas energías no hace al transporte dependiente totalmente del petróleo.

Esta condición ha tenido efecto en los movimientos migratorios y en el favorecimiento de la circulación de personas y mercancías, de instalaciones descentralizadas de los procesos productivos, de contratación de mano de obra de distintas nacionalidades a un mismo tiempo, gerencias altamente centralizadas y mano de obra dispersa, aglomerada en talleres y aislada en sus domicilios.

Producir en tierra y en alta mar, distribuir por cielo, agua y suelo, acopiar y entregar con transacciones digitales mediante y circular dinero por esa vía.

¿Pero todo es virtual?

Medios de Producción

Todo el mundo digital tiene un fuerte sustento de materialidad como cualquier Industria; esta faceta estratégica del mundo virtual se ha mantenido fuera del campo visual del ojo de la cerradura, porque entre otras cosas, a algún marxista ortodoxo se le podría ocurrir como en la época de la revolución industrial, plantearse su apropiación, o a modernosos sans-culottes, sabotearlos.

Después de todo seguimos hablando de la Cuarta Revolución Industrial, así que observar la materialidad de ésta revolución, como en la primera, parece un factor fundamental.

En este caso las empresas son poseedoras de Data Centers y los cableados que arman las rutas por tierra y mares.

Un conocimiento cercano de la base material de lo digital debería permitir la siguiente interrogante: ¿pensar en la propiedad social de los Data Center puede ser la forma de definir socialmente establecer sus contenidos, de la distribución del conocimiento en función de las grandes mayorías?

Entre las principales empresas de centros de datos se encuentran Amazon Web Services (AWS), Microsoft Azure, Google Cloud, Equinix, Digital Realty, y Ascenty.

Los data centers se han convertido en la columna vertebral de la Revolución Digital, enfrentando una explosión de datos debido al aumento de la actividad online y la adopción de tecnologías como la Inteligencia Artificial, el Internet de las Cosas y el Big Data.

La primera de las tendencias de los data center para 2025 es la automatización de infraestructuras, ya que aprovecha la tecnología para hacer funcionar los centros de datos con menos intervención humana. En este contexto, diversas tecnologías apoyan el control de los componentes de hardware, software y redes, así como de los sistemas operativos y el almacenamiento de datos. La necesidad de automatización viene impulsada por el crecimiento exponencial de los datos, que exigen una gestión eficaz para reducir los costes operativos, mejorar el rendimiento y minimizar los errores.

Arquitectura

En lugar de construir campus cerca de grandes zonas urbanas, algunos centros de datos se están trasladando a regiones rurales con costes energéticos más bajos, climas más fríos y menos preocupación por la latencia de la red. Estas zonas también suelen ser propicias para la producción de energía renovable in situ y pueden satisfacer la elevada demanda de energía de un centro de datos habilitado para IA[vii].

Otra de las tendencias data center para 2025 es el triunfo definitivo de los centros de datos modulares. Y es que, para hacer frente a los elevados niveles de inversión de capital, los largos plazos de construcción y la reducción de los ciclos de vida de los equipos informáticos, cabe esperar que la construcción de centros de datos sea mucho más modular y pre fabricada en los próximos años.

Interconexión de la dominación

Un mundo interconectado implica una profundización de la dominación, del poder de los dominantes sobre los dominados; dominantes y dominados dentro del universo digital e incluso dominados de los excluidos de él.

Si la burguesía expropiaba el conocimiento proletario en el proceso productivo, la Oligarquía del conocimiento se apropia de más conocimiento y hace uso del mismo bajo un repetido esquema de concentración, casi monopólica.

Nuevas preguntas requieren la búsqueda de respuestas sin esquemas preconcebidos.

¿Cuál, como y donde está la base social que permita una transformación del antagonismo dominantes y dominados?

¿Esa base social de existir, hará su síntesis política en un Partido o Internacional Política superadora del régimen de dominantes-dominados?

¿Es el mundo digital el nuevo fetichismo de la burguesía?

¿Cuál es la expresión digital del Capital y cuál la del trabajo?

¿Hay plusvalía del conocimiento?

¿Cómo se expropia el conocimiento, se arrebata de los círculos dominantes?

¿Será un camino de las inmensas mayorías excluidas ocupar y apagar la llave de los Data Center para exigir un programa político que los incluya?


[i] La era de la Información. Manuel Castells.

[ii] Decía el especialista en ingeniera electrónica  y laboratorio de IA Edward Fredkin “La cuestión es donde quedamos nosotros. Es bastante complicado imaginar una maquina millones de veces más lista que el más listo de nosotros y que, sin embargo siga siendo nuestra esclava. Puede que condesciendan a hablarnos, pueden que juegue a cosas que nos gusten, puede que nos tenga de mascotas” (citado por Jack Copeland en Inteligencia Artificial).

[iii] La paulatina transformación del homo sapiens al homo videns tiene un primer impacto que es el poder de lo visible sobre lo inteligible, una agonía del pensamiento abstracto. “La llamada realidad virtual es una irrealidad que se ha creado con la imagen y que es en realidad sólo en la pantalla. Lo virtual, las simulaciones  amplían desmesuradamente las posibilidades de lo real; pero no son realidades”. (Homo videns. La sociedad Teledirigida. Giovanni Sartori)

[iv] “El conocimiento sensorial constituye la etapa inicial  de la actividad cognoscitiva. La interacción directa de la humanidad con la realidad circundante tiene un significado esencialmente inicial para todo el proceso del transcurso del proceso cognoscitivo. El conocimiento sensorial está indisolublemente unido a la práctica, en particular a la formación y realización de los objetivos, al pensamiento y al lenguaje”. (Materialismo Dialectico. F Burlatski)

[v]  Artículo “De la batalla del relato histórico a la guerra cognitiva en la comunicación (Ricardo Pose)https://www.carasycaretas.com.uy/politica/de-la-batalla-del-relato-historico-la-guerra-cognitiva-la-comunicacion-n80991

“En la guerra cognitiva la información apela al estímulo de lo emotivo sobre lo racional es una de las características de los nuevos tiempos en época de redes sociales. Pensar en la ingenuidad de un mundo libre que nos permite vivir una realidad paralela en las distintas aplicaciones, por fuera de intereses políticos y económicos, es una de las principales vulnerabilidades de la sociedad occidental”.

[vi] “Los medios masivos de comunicación confieren status a acontecimientos públicos, personas, organizaciones y movimientos sociales; hay una reputación social alcanzada (legitimación) por personas o movimientos sociales cuando logran la atención favorable de los medios de comunicación.  Establecen ciertos status que imponen normas sociales y generan aquello de “lo que no está en la televisión no existe”. (La comunicación de masas Heriberto Muraro)

[vii] Los algoritmos de IA pueden predecir fallos de hardware y otros problemas antes de que se produzcan, minimizando el tiempo de inactividad y los costes de mantenimiento.

Sin embargo, persisten algunos problemas, como el elevado coste de la inversión inicial, la complejidad de la integración con los sistemas existentes y la preocupación por la ciberseguridad.

Con la presión de empresas y Gobiernos en favor de la descarbonización, los Green Data Center han pasado de ser una palabra de moda a un objetivo clave. Se prevé que en 2025 los centros de datos representen el 3,2% del total de las emisiones mundiales de carbono, lo que convierte la descarbonización en un área de atención crítica. Los centros de datos modernos, a menudo grandes consumidores de energía, se verán más presionados que nunca para ser más eficientes energéticamente y reducir su huella de carbono.

Además, de aquí a 2025, las normativas sobre consumo energético serán probablemente mucho más estrictas, lo que obligará a los centros de datos a adoptar prácticas más ecológicas. Por ejemplo, la Directiva revisada sobre Eficiencia Energética (DEE) de la Unión Europea, concebida para reducir el consumo de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero, exige a los propietarios y operadores de centros de datos de sus 27 países miembros que comuniquen anualmente a una base de datos de la UE datos sobre el consumo de energía y agua, y el primer plazo venció a mediados de septiembre de este año.

Por otra parte, a medida que crece la adopción de la IA, se espera que la demanda de energía de los centros de datos de todo el mundo aumente un 160% para 2030, mientras que las emisiones de dióxido de carbono podrían más que duplicarse antes del final de la década, según Goldman Sachs Research.

Otra de las tendencias de los data center para 2025 apunta a que los centros de datos alimentados por energía nuclear también están en alza. Los pequeños reactores nucleares modulares (SMR) son una alternativa ecológica para aumentar la producción de energía en régimen continuo en la red, haciendo que los proyectos dependan menos de fuentes de energía no renovables.

Otra de las grandes tendencias de los data center para 2025: las nubes híbridas y el multicloud, que, sin duda, serán la nueva normalidad de 2025. Y es que se confirma que las empresas inteligentes han dejado de poner todos los huevos en la misma cesta de la nube. En 2025, las organizaciones con más éxito orquestarán sofisticadas estrategias híbridas y multinube, combinando infraestructuras públicas y privadas de múltiples proveedores. Este enfoque no consiste únicamente en evitar la dependencia de un único proveedor.

Con una previsión de que la ciberdelincuencia cueste 12.000 millones de dólares en 2025, los reguladores adoptarán un papel más activo en la protección de los datos de los consumidores, mientras que las organizaciones pivotarán para adoptar medidas de seguridad más proactivas para limitar los impactos materiales. Las predicciones de Forrester de este año sobre ciberseguridad, riesgo y privacidad para 2025 reflejan cómo deben evolucionar las organizaciones para hacer frente a estos ámbitos de riesgo emergentes.

Un tema central es la refrigeración líquida. Las tecnologías de refrigeración líquida han sido la mayor tendencia en el mercado de centros de datos de 2024, como resultado de la demanda de inteligencia artificial. Los métodos de refrigeración alternativos, como la inmersión, la refrigeración directa al chip y los intercambiadores de calor de puerta trasera, se están generalizando en el diseño de los centros de datos, ya que la refrigeración por aire estándar no es adecuada para el aumento de la demanda de energía.

El aumento de la refrigeración líquida, una de las grandes tendencias de los data center para 2025, está afectando a los diseños de referencia debido a las mayores densidades de potencia. La planificación y programación de edificios, las soluciones de carga estructural y las densidades de rack también se han visto afectadas por las necesidades de refrigeración líquida.

 

 

 

lunes, 3 de marzo de 2025

La euforia de la gente y los limites del progresismo

 


Los frenteamplistas tenían buenos motivos para festejar este primero de marzo el retorno al gobierno.

El primero sin dudas de carácter emotivo en una sociedad de tradición electoral donde los resultados de triunfos y derrotas se viven con el entusiasmo de un campeonato de fútbol.

El segundo un poco mas de valoración política y hace al desplazamiento del gobierno de Derecha de Lacalle Pou; para el Presidente del Frente Amplio Fernando Pereira y muchos frenteamplistas, este triunfo es el inicio de una era progresista para el Uruguay, que imaginan se consolida en un ciclo que se afianza en el 2050.

El tercero y sin ser el último, la renovación de los cuadros dirigentes del progresismo de la izquierda en el gobierno, en los ministerios y en el parlamento. (entre los sub 30 y sub 50).

Hay augurios de que el Frente Amplio pueda ganar en mayo algunos gobiernos departamentales, volviendo a gobernar en algunos de ellos (Rocha, Maldonado, Paysandú por ejemplo) y mantenga los actuales (Montevideo, Canelones, Salto).


Es una euforia legitima a riesgo de olvidar que representan un poco mas de la mayoría del padrón electoral y en un país donde el voto es obligatorio, huelga decir, es casi mas de la mitad de la sociedad.

Esto queda reflejado en la Cámara de diputados donde nadie tiene la mayoría y el Frente Amplio corre con la ventajas de las contradicciones entre los sectores políticos de la Derecha y el errático rumbo que puede tomar la ultra derecha nacionalista (Cabildo Abierto) y el amorfismo ideológico de Identidad Soberana.

Las preguntas que vuelven a surgir entonces tienen que ver con: ¿Cuál es el destino de la euforia del frenteamplismo, en que estrategia de acumulación política se sintetiza? o ¿solamente se diluye hasta las nuevas elecciones?, ¿Cómo se transforma el caudal electoral en caudal militante? o ¿son dos universos diversos donde el caudal electoral permite disputar las elecciones, acceder al gobierno pero no disputa el poder político?


El impulso y su freno

La organización exhibida el primero de marzo en anillos de seguridad "popular", sigue descansando en la militancia de cierta parte de la Izquierda Social (fundamentalmente la sindical) y en los cada vez mas reducidos sectores de militancia política.

Pero pensada la capacidad de movilización como sostén del futuro gobierno progresista tiene por delante una serie de nudos por desatar.

El primero es como resolverá la Izquierda Institucional el relacionamiento con la Izquierda Social.

Las señales de futura gestión del Ministro de Economía no son auspiciosas para el movimiento sindical, el único sostén con capacidad de movilización en la calle.

La bifurcación de caminos en cuanto a la movilización contra las AFAPS y el resultado del plebiscito de octubre del 2024, aún no permite visualizar donde se encontrarán, mas allá de la promesa de Orsi del Diálogo Nacional, pero confiado que así será, se vuelve a priorizar la buena gestión y los acuerdos políticos por lo alto, sobre la movilización.

Se impone la consigna Gobernar para la gente, en vez de Gobernar con la gente.

A pesar de los desafíos jurídicos e incluso de juicios internacionales, el gobierno tiene una posibilidad histórica de sintetizar la movilización social y la gestión Institucional, dejando sin efecto el Proyecto Neptuno, dando una señal clara en defensa de los recursos naturales del Uruguay, en este caso los hídricos.

Luego de 50 años, el gobierno de Orsi tiene en sus manos también la oportunidad histórica (el tiempo apremia), de atender el reclamo de Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, e imponerse como Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, para hacerse de la Verdad.



Quizás para un gobierno de izquierda (aunque este tiene un acentuado perfil progresista) las vacilaciones en cuanto a una clara política exterior respecto a Cuba, Venezuela, Nicaragua e Israel mantenga una distancia de los sectores que dentro de la Izquierda se definen como socialistas y que en el caso especifico de lo que sucede en Gaza, lo distancia de las visiones mas pacifistas y humanitarias.

Seguramente estas pequeñas grietas no empañen la gestión de gobierno ni los futuros resultados electorales, pero mellan la capacidad de movilización que permite a la Derecha ganar espacios físicos.



Atajando Penales

Cierto es sin embargo que el nuevo gobierno del Frente Amplio no llega con el calor de las olas progresistas y gobiernos de izquierda de los primeros años del siglo 21, y vive el avance de los neofascismos a nivel internacional y luego de 5 años de un gobierno de Derecha.

En ese sentido, el progresismo uruguayo en el gobierno como en el fútbol, parece haber definido una estrategia de poner todo el equipo atrás, y casi podría decirse que colocando los once jugadores a atajar penales.

Habrá que ver si es capaz de dejar los delanteros esperando el contragolpe y el entusiasmo popular se hace presente al menos, en las tribunas.








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