Desde el río hasta el mar
El rompimiento del alto al fuego por parte de Israel no significó un cambio en la estrategia militar de “cerco y aniquilamiento”; las cifras de civiles, niños y niñas, desplazados, refugiados tanto en Gaza como en Cisjordania que mueren producto de los bombardeos o acribillamientos no parecen ser los combatientes de Hamas, los que extrañamente no aparecen en las imágenes como el objetivo abatido.
“El cineasta
palestino Hamdan Ballal, uno de los directores del documental ganador del Óscar
“No Other Land”, fue atacado por colonos israelíes en la comunidad de Masafer
Yatta, en el territorio ocupado de Cisjordania, fue arrestado por soldados
israelíes y quedó detenido durante la noche. La incursión y el ataque de los
colonos a esta aldea comenzó poco después del momento en que sus habitantes
habían roto su ayuno diario de Ramadán. El otro director palestino de No Other
Land, Basel Adra, fue testigo del ataque. En conversación con ¡Democracy Now!,
Adra cuenta que los “colonos y soldados juntos atacaron físicamente [a Ballal],
con brutalidad, y se lo llevaron” y, mientras tanto, los soldados apuntaban con
armas de fuego y efectuaban disparos de advertencia contra un grupo de gente de
la comunidad en el cual había mujeres y menores de edad. Cuando lo estaban
golpeando, Ballal gritaba “Me estoy muriendo”. El ejército israelí ha acusado a
Ballal y a otras dos personas palestinas de arrojar piedras a los soldados, pero
otra testigo ocular, la activista judía estadounidense por la paz Anna Lippman,
quien también nos acompaña en Democracy Now!, dice que estas son acusaciones
infundadas: “El doble rasero es tan fuerte aquí, en Cisjordania, que la
población palestina sabe que tocar una piedra puede costarle la vida”. Adra
insta a la comunidad internacional a intervenir para poner fin a la ocupación
violenta de Masafer Yatta, donde “casi todos los días hay ataques”. Según los
informes, después de finalizada esta entrevista, Ballal habría sido liberado de
la custodia israelí y devuelto a su familia”.
Para la sociedad
occidental los conflictos en Medio Oriente han dejado de ser una realidad
lejana y hasta un acto de reconocimiento artístico, nada menos que en el
glamoroso Festival de los premios Oscar, entra en la lógica beligerante.
Lógicas de Guerra
Hace pocos días
fue presentado el documento titulado The 7 Octubre Parliamentary Commission
Report, conocido también como The Roberts Report, elaborado por la Comisión
Parlamentaria del 7 de Octubre, presidida por Lord Andrew Roberts of Belgravia
e integrada por miembros de ambas cámaras del Parlamento británico. Redactado
entre enero de 2024 y enero de 2025, la investigación busca preservar un
registro histórico riguroso de los ataques ocurridos el 7 de octubre de 2023,
frente al surgimiento de narrativas que niegan o distorsionan los hechos. “Este
informe busca asentar pruebas irrefutables, ahora y para el futuro, de que casi
1.200 personas inocentes fueron asesinadas por Hamas y sus aliados, en escenas
de barbarie que no se veían desde la masacre de Nankín en 1937″, afirma en su
introducción.
Los grandes
medios de comunicación al servicio de las corporaciones han instalado la idea
de una guerra defensiva por parte de Israel que empezó el 7 de octubre del
2023; no dar cuenta del contexto histórico siempre colabora con las campañas de
manejo de la opinión pública.
Lo cierto es que
el territorio palestino siempre fue objeto de intentos de colonización, desde
los hebreos conducidos por Abraham en el año 2000 A.C. , siete siglos después
desde Egipto por las tribus de Moisés que cuatro siglo después logró derrotar
David y en el año 332 A. C conquistada por Alejandro Magno y luego de unos años
de soberanía a la muerte del Heleno, invadida a sangre y fuego en el 63 AC por
el imperio romano.
Los Otomano
tuvieron a Palestina en su poder hasta el inicio de la primera guerra mundial;
Inglaterra (el del actual informe parlamentario) ofreció sus servicios para
derrotar a los turcos pero el precio de su “ayuda” fue imponer su idea de crear
un estado judío y otro árabe y mantener el control británico en Tel Aviv.
En 1947 “el lío”
generado por Inglaterra que conto con una fuerte resistencia del pueblo
palestino, fue pasado a la ONU quien elaboró un nuevo plan de partición con una
población de 749 mil árabes y 9520 judío en tierra árabe mientras que en la
parte adjudicada al estado judío habitaban 497 mil árabes y 498 mil judíos.
En 1948 grupos
sionistas emplearon el terrorismo para obligar al desplazamiento de los
palestinos y abril de ese año un destacamento al mando de Menahem Begin asesinó
a 254 civiles en la aldea de Deir
Yassin.
Basta ver el
territorio de Gaza y Cisjordania para ver como Israel fue ampliando territorio;
en 1967 estalla La Guerra de los Seis Días y ante la derrota de los ejércitos
árabes, algunos grupos que integraban el Consejo Nacional Palestino
desarrollaron una guerra de guerrillas obteniendo su primera victoria en 1968,
donde cobra vigor la Organización Para la Liberación de Palestina (OLP).
En 1986 estalla
la Intifada, un levantamiento popular con declaración de huelgas y
movilizaciones callejeras que crecen a medida que las víctimas del ejército de
Israel vuelen a ser ancianas y niños con hondas.
Hasta ahí, incluso
sin tomar en cuenta a Sun Tsu, se podría hablar de “guerra”
Genocidio
El 18 de marzo de
este año luego de 67 días de la firma
del acuerdo, Israel rompe el alto al fuego, luego de terminado el ayuno del
Ramadán. Este ataque cuenta con el respaldo del Presidente de Estados Unidos
quien se ha planteado la eliminación de los palestinos en Gaza para sus nuevos
planes de reordenamiento territorial.
El 19 de Marzo en
Uruguay la Asociación Cultural Israelita Zhitlovsky junto a otras
organizaciones que integran la Coordinadora Por Palestina condenan el ataque;
en igual sentido se pronunciaron el Comité ejecutivo del Partido Comunista del
Uruguay y del Partido Socialista.
En un balance no
definitivo, ya que las cifras se basan únicamente en los cuerpos que llegan a
los hospitales, la agresión de la ocupación israelí contra nuestro pueblo en
Gaza y Cisjordania es de 51.106 personas asesinadas y 120.828 heridos, desde el
7 de octubre.
Franja de Gaza:
más de 50.183 asesinados y más de 113.828 herido, Cisjordania: 923 asesinados
(entre ellos 182 niños y 18 mujeres) y más de 7.000 heridos.
17.581 Niños
asesinados en Gaza, 33 niños murieron por desnutrición y deshidratación: 28
eran menores de 5 años, más de 50.000 niños están con desnutrición aguda, 211
niños nacieron y fueron asesinados durante el genocidio, 825 niños murieron antes
de cumplir su primer año, 35.060 niños convertidos en huérfanos,32.000 niños
heridos, la mayoría con lesiones que cambiaron su vida como amputaciones.
41 personas muertos por desnutrición y
deshidratación.
1.100.000
personas se enfrentan a niveles catastróficos de inseguridad alimentaria.
11.000 desaparecidos; presumidos muertos bajo
los escombros.
52.000 mujeres embarazadas. Alrededor de 183
nacimientos al día, 12.048 mujeres y 3.447 adultos mayores asesinados.
1,93 millón de desplazados: 15% de ellos con
capacidades diferentes.
1057 trabajadores de la salud asesinados y 310
trabajadores de la salud prisioneros en Israel.
Más de 12.700 estudiantes asesinados, más de
895 profesores y administrativos asesinados.
280 trabajadores humanitarios asesinados, 243
de la ONU, 70 miembros del personal de Defensa Civil y Rescate asesinados, 196
instalaciones de la UNRWA destruidas; 95% de las escuelas UNRWA, 563 personas
fueron asesinadas y 1.790 heridos en estos refugios de la UNRWA.
83% de los pozos de aguas subterráneos no
funcionan.
No hay datos de
las bajas de integrantes de Hamás u otra organización armada.
Uruguay
En Uruguay las
movilizaciones de la Coordinadora Por Palestina cada vez son más contundentes en
las calles de Montevideo y en Paysandú.
Mientras algunos
sectores pedían la condena del Estado uruguayo a Israel, el gobierno de Lacalle
abría una oficina del gobierno en Jerusalén, (la Agencia de Investigación e Información
en convenio con una Universidad de Israel).
Uruguay reconoció
a Palestina en 2011 y las cifras del genocidio pertenecen a la Embajada de
Palestina en Uruguay.
Pero en enero del
año pasado, la Cancillería citó a la embajadora palestina Nadya Rasheed por sus
comentarios respecto de la relación entre Uruguay e Israel, y la posible
vinculación que estableció entre la habilitación a exportar carne con hueso y
el posicionamiento del país.
Rasheed (que ya
no es embajadora en Uruguay) había expresado: “Mientras la CIJ delibera sobre
el caso contra Israel presentado por Sudáfrica y apoyado por muchos Estados, al
96° día de genocidio, esperábamos al menos que Uruguay hubiera pedido un alto
el fuego”, desde la cuenta oficial de la Embajada de Palestina en el país.
“Seguimos esperando que alce su voz por ello”, añadió, etiquetando a
Comunicación Presidencial y al Ministerio de Relaciones Exteriores.
El ministro de
Relaciones Exteriores uruguayo Mario Lubetkin afirmó en entrevista radial que “Hamás
no representa para nada el espíritu del pueblo palestino” pareciendo afiliarse
a la teoría de la guerra.
Desde el 19 de
marzo, día de la reanudación de las hostilidades por parte de Israel no hay un
comunicado de la cancillería uruguaya que defina su postura.
Esta política del
canciller uruguayo (paradojalmente militante del Partico Comunista en su
momento e integrante de una de las pocas organizaciones judías de izquierda en
Uruguay) parece alinearse con la definición “neutral” de no reconocer ni a
Edmundo Gonzales ni a Nicolás Maduro como Presidentes de Venezuela, o aceptar
el ingreso de tropas de élite del ejército de los Estados Unidos para adiestrar
a las Fuerzas Armadas Uruguayas en tácticas de combate contrainsurgentes.