El Camino Virtual del Imaginario Ascenso Social.

Maria vive en mi barrio desde hace pocos años; llego con 8 de edad con su mama y su sobrinita, hija de su hermana adolescente. Ocupan una casa muy precaria de uno de los tantos "novios"

que su mama tiene esporadicamente, pero este nuevamente la abandono y la dejò por un tiempo, habitar alli.
La mama de Maria, jefa de hogar, hace changas de limpieza domestica por no consigue trabajo fijo, y su hermana nuevamente embarazada dejo de cuidar los niños como un laburito que se habia conchavado.
Gracias al Plan Ceibal y a poder ingresar a Facebook, Maria retoma on line sus afectos de su lejana ciudad de Tranqueras y virtualmente, recompone los lazos familiares, por que ella, su madre y su hermana se han construido el correspondiente perfil.
Su mama tiene celular; por alli tambien se conecta a familias y otras formas de relacionamiento Social. Como en el barrio ningun niño de la edad de Marita tiene celular, no forma parte de sus deseos mas inmediatos, aunque mire con cierta envidia a las pocas niñas que llevan uno a la escuela.
Asi que, lo mas tecnologico a su alcances es la ceibalita, y sobre todo, en la combinacion de estos dos aparatos, subir fotos para su familia y todo el que las quiera ver.
Imagenes graciosas, divertidas, de algun festejo, encuentro, siempre en unos entornos de paisajes muy bonitos que el barrio brinda.
No forma parte la escenografia real, de paredes de bloques sin revocar e instalaciones de luz y agua por fuera, la ropa desgastada, el calzado sin reciclar.
Marta, que almuerza en la escuela y matea de noche esperando para volver a comer hasta el otro mediodia o la tirada mas larga hasta el proximo lunes, por que el almacen ya no le fia mas hasta pagar la quincena,que renueva la ropa en las donaciones recien llegadas a la iglesia, se conecta con fulano, con sultano, y con mengano que es de lo mas ocurrente, picaro, un poco "salado" en los chistes de contenido sexual pero que manda fotos desde Punta del Este, o en graciosas poses en el Hiundai de sus padres.
Visto el mundo desde la pantalla, y mientras dura la conexon on line y tambien la magica del cerebro al computador, no hay diferencias entre los seres que habitan la red. A su modo Maria forma parte de otros mundos, mundos que en general la excluyen, quizas sin la groseria de hacerla sentir un proyecto fracasado de la sociedad, que camina y se tranforma solo para unos pocos.
Ojo, estamos en el desarrollo de plenas politicas sociales de inclusión; el problema aqui no es el desconocimiento de dichas politicas y entre ellas la conectividad de las ceiblaitas y el furuto Plan Cardal.
El Problema cultural e ideologicamente es que esa realidad virtual en la que se sumergen unos cuantos ciudadanos de cualquier edad, credo y color los condicione de tal manera que surga cono un proyecto viable la posibilidad de ascenso coial estilo americano, por segun la cual el botija que distribuye periodicos desde su bicleta puede llegar a gerente de la IBM.
Tampoco planteamos la primitiva consigna de los primeros obreros inlgeses de boicotear las maquinas o arenagr en contra de su uso (que cierta izquierda ya supo hacer, comicamente ante la presencia del mundo internautico).
El tema es brindar elementos de "flotacion" por encima de la navegabilidad virtual, para que Maria no llegue al fin de sus dias, tan excluida como siempre, pero convencida de que pertenece.
Hacerlo urgente, antes que a Maria se le fije la idea de que teniendo la pantalla lo demas no importa, y si viene, viene. Ese "viene" incluye una lista muy larga que va dese el empleo y un buen ingreso,actividades sociales,y otras construcciones de relaciones civilizadas hasta como las conocimos hasta hace bien poco. Aunque ella pueda tener un novio, y familia virtual.